La apertura de las exportaciones en nuestra gastronomía

La medida del gobierno macrista de abrir las exportaciones tendrá repercusiones en varios rubros y la gastronomía por supuesto se enfila en las líneas de los cambios. La esencia de la cocina mendocina se ha basado en productos de nuestra tierra, lo cual ha sido un gran logro para los productores locales pero generó una homogeneidad de cocinas ya que todos los chefs utilizan los mismos ingredientes con más o menos técnicas y creatividades. Ahora el escenario ofrece otras alternativas, y nuevos productos ingresarán para desafiar la cocina mendocina. De esta manera se abre el juego del mundo culinario permitiendo que nuevos productos ingresen en la canasta de todos los mendocinos e interactúan con una gastronomía que ha hecho un largo camino y ha conseguido destacarse en el país. De esta manera, los hacedores esperan las novedades que el mercado promete ofrecer. Por otro lado, también genera que inversionistas apuesten a una de las plazas gastronómicas más importantes del país con el ingresos de franquicias gastronómicas que no tardarán en llegar a Mendoza. Mientras que las cocinas internacionales permitirán darle una vuelta de turca a lo étnico en la provincia ya que por el momento la única que ha tomado vuelo en cierta manera es la cocina peruana que pese a tener sus dificultades para acceder a productos típicos, consiguió que varios referentes la condujeran al paladar de los mendocinos. Por otro lado, analistas e inversores consultados por Clarín identificaron los sectores en los que hoy la economía está ofreciendo oportunidades y uno de los más altos son los emprendimientos de productos alimenticios gourmet que por supuesto tiene un importante auge en nuestra provincia y permite pensar nuevamente en la exportación.

Turismo en colectivo

El auto quedó obsoleto cuando descubrimos una entretenida propuesta que crece en la provincia y permite disfrutar del turismo con otras personas, se trata de los buses turísticos. Estos permiten descubrir Mendoza en su faceta urbana, natural y vitivinícola. Por Carla Luna El ómnibus es por lo general el medio de trasporte más utilizado en la provincia y muchos suelen usarlo a diario para movilizarse, pero pocas veces se piensa en este medio como una posibilidad de hacer turismo, sin embargo el Gran Mendoza tiene excelente propuestas para conocer la ciudad y sus alrededores de manera divertida, al estilo de las grandes ciudades del mundo con guías poliglotas y el sistema Hop on & Hop off, el cual permite bajar y subir del transporte todas las veces que el turista lo prefiera. La Ciudad de Capital tiene en funcionamiento “Mendoza city tour”, una propuesta de buses turísticos a los cuales se accede comprando el ticket de manera online o en cualquiera de sus puestos de venta ubicado en todos los centros de información turística de la Ciudad por un costo de $75 por persona. El recorrido se basa en 15 paradas que constituyen los puntos de mayor interés de la Ciudad de Mendoza, entre los que se destacan: Cerro de la Gloria, Parque General San Martín, Plaza Independencia, Área Fundacional, Acuario Municipal, Parque Central, Barrio Cívico y la alameda con su peculiar belleza y su papel en la historia. El viajero puede bajarse en una de las paradas y recorrer los sitios de interés aledaños al señalado pudiendo se esta manera ampliar la excursión y volver a subirse al próximo bus con el mismo ticket, lo cual permite que cada persona recorra la ciudad a su propio tiempo. Cada parada está pensada estratégicamente con el fin de que sea útil para conocer la Ciudad y su entorno, tanto en sus atractivos culturales y gastronómicos, como históricos o de entretenimiento. Este tipo de servicio le permite al turista aprovechar y organizar su tiempo para tener un pantallazo del lugar y planificar otras visitas que le lleven más tiempo. Además es importante destacar para un mejor conocimiento de cada sitio de interés, los buses ofrecen audio-guía en idioma castellano, inglés y portugués, y pronto en alemán, francés, italiano, chino mandarín y japonés, durante todo el recorrido. Para conocer más sobre esta propuesta www. mendozacitytour.com La ciudad también puede recorrerse en buses sin techo que suelen verse en el Parque General San Martín, el cual tiene cientos de recovecos que nunca se terminan de conocer y encantan a todos los turistas. Las Bateas del Parque son una excelente opción para disfrutar el día descubriendo las bellezas naturales del pulmón verde más grande de Mendoza. Desde 1945, el Oro Negro ofrece esta entretenida propuesta de bateas, nombre que surge porque la parte descapotada de los primeros ómnibus era más chico y los laterales de atrás eran curvos, lo que los hacía parecer una pileta. Un plan ideal para los días de calor y un gran atractivo para los niños. En la actualidad cuentan con guía bilingüe y tiene dos circuitos: Centro y Parque que pueden hacerse por separado a un costo de $45 cada uno o combinar ambos por $70. El ticket vale por 2 días usando también el sistema Hop on & Hop off. El circuito Centro tiene una duración de una hora si no se desciende del bus, partiendo de la equina céntrica de las calles Sarmiento y Chile, visita las principales plazas de la Ciudad, Barrio Cívico, Área Fundacional y Acuario. Mientras que el circuito Parque General San Martín, sale del mismo lugar ingresa por los emblemáticos portones, pasa por la Fuente de los Continentes, el Lago General Espejo, la Ciudad Universitaria, el Zoológico y hace una parada larga en el Cerro de la Gloria donde se explaya la historia del General San Martín y su proeza y se aprovecha para vistas panorámicas de la ciudad. Las bodegas se suman al plan con el Bus vitivinícola, un medio de transporte enoturístico de la provincia que opera bajo la modalidad de Hop On & Hop Off, con minibuses de 24 butacas. Sale desde la Ciudad de Mendoza “Capital Internacional del Vino” permitiendo a mendocinos y turistas vivir una experiencia única de recorrer Los Caminos del Vino y Rutas Gastronómicas de Luján de Cuyo. Su frecuencia es de 4 salidas semanales (miércoles, jueves, viernes y sábado). Con la compra de un solo ticket, los pasajeros pueden subir y bajar en las distintas paradas a lo largo del trayecto en sus diez horas de duración, con la posibilidad de hacer degustaciones y catas; almorzar; participar en programas de cosecha o poda, hacer cabalgatas o simplemente comprar buen vino. Los tickets se compran en los hoteles 4 y 5 estrellas, en Plaza de Chacras y el Informador Turístico de Garibaldi y San Martín. La ronda es acompañada por un guía, que explica el recorrido y da información sobre las bodegas para ayudar al cliente a realizar la agenda de visitas. El sistema de Hop On & Hop Off, permite al pasajero subir y bajar en las bodegas en horarios determinados. El bus realiza 5 pasadas por cada bodega en horarios publicados, donde por convenio, una guía de la bodega recibe a los pasajeros del Bus Vitivinícola para realizar la visita y degustación. Al ingresar a cada bodega, el pasajero abona una entrada, que incluye la Visita y Degustación, mientras que el traslado tiene un costo de $190 con la opción de pquete que incluye el día completo en bodegas de $690. La propuesta se toma en Día completo o medio día. En la primera se toma el Bus por la mañana en cualquiera de las paradas fijas y se regresa por la tarde, pudiendo visitar hasta 4 bodegas con opción a almorzar en una bodega a cargo del cliente. O se puede tomar un paquete que incluye degustaciones en bodegas, almuerzo y recorrida en bicileta por los viñedos a $790 por persona. La segunda puede hacerse de mañana o de tarde logrando visitar solo 2 bodegas en el recorrido. El valor del traslado es de $190, a lo que se suma el plan en las bodegas elegidas en dos circuitos Camino del Vino El Sol (conformado por las bodegas: Dante Robino, Casarena, Vistalba, Clos de Chacras y Tierras Altas) y Camino del Vino Luján Sur (incluye Chandon, Dolium Bodega Subterránea, Tapiz, Dominio del Plata, Séptima, Otaviano y Terrazas de Los Andes) Además es importante destacar otros medios de transporte público que aunque no responden al carácter meramente turístico se suman al atractivo de la provincia. El corazón urbano se puede recorrer en el Tranvía de Compras que recrea el tranvía original y en la actualidad solo hace una manzana grande que incluye las avenidas: San Martín, Colón, Belgrano y Las Heras. Por otro lado el metrotranvía con paradas ultramodernas y un servicio de primer nivel permite viajar desde Ciudad a Maipú pasando por Godoy Cruz y logrando visualizar arte, bodegas y el viejo trazado del Gran Mendoza partiendo desde la antigua estación de ferrocarril. Con esto se aprecia otro modo de ver nuestra bella ciudad.

Cuando la cultura se hace turismo

Museos y espacios culturales abren una interesante propuesta turística en la misma ciudad Por Carla Luna “Se consideran Museos a aquellas instituciones que buscan brindar un servicio a la sociedad a través de ciertas funciones como las de coleccionar, conservar, poner en valor y dar a conocer las evidencias materiales y simbólicas de una comunidad y su medio ambiente” dice Marisul Ibañez, Ministra de Cultura de la provincia. A partir de este concepto nos peguntamos ¿Qué pasa con los museos y espacios culturales de la provincia? ¿Por qué a los mendocinos nos cuenta tanto visitarlos? ClubHouse consultó a algunos de sus lectores y la respuesta más frecuente fue que desconocían que hay dentro de ellos y que pueden ofrecer. Lo irónico es que cuando viajamos no nos perdemos un solo museo y muchos turistas que visitan nuestra provincia se sorprenden con el lugar que ocupa la cultura, el arte y la ciencia en Mendoza. Por lo que proponemos un fin de semana de turismo cultural y animarse a visitar estos sitios de alta valorización cultural avocados en algunos casos a la historia de la provincia como es el caso del Museo del Pasado Cuyano o el Área Fundacional. El Museo del Pasado Cuyano es una casona construida en el año 1873 ubicada en la calle Montevideo 544, la cual fue decretada Monumento Histórico Nacional. Contiene una colección de documentos históricos y mobiliario de los siglos XIX y XX. Fue la casa de los gobernadores Francisco y Emilio Civit, donde además se alojaron personajes de la vida política del país como Julio A. Roca, Nicolás Avellaneda, Miguel Juárez Celman, Domingo Faustino Sarmiento y Pedro Mont, entre otros. Se puede visitar de Martes a Sábados de 9 a 19.30 por un costo de $15. El Área Fundacional recupera parte de la Mendoza fundada en 1581 por Pedro del Castillo, la cual quedó bajo ruinas tras el terremoto de 1881. La Plaza que lleva el nombre del fundador conserva verdaderos tesoros en sus excavaciones, como los restos del original Cabildo de la época colonial y la fuente que nutría de agua a antiguos pobladores. En el corazón del Área Fundacional se encuentra el museo de tipo arqueológico, único en la ciudad con salas de exposición en las que a través de diversos medios didácticos, se aprecia las fases del poblamiento territorial mendocino y los restos arquitectónicos y patrimoniales hallados. Cuenta con una cámara subterránea que protege las ruinas de la fuente construida en 1810, y la construida posteriormente en 1930, además se recuperaron los restos de un hornillo que evidencia la presencia de los huarpes. En el ala Norte del Museo funciona en un pequeño restuante especializado en cocina cuyana, se encuentra abierto de Martes a sábados de 8 a 20 y tiene un costo para adultos de $18. Como parte de este recorrido vale la pena detenerse en las Ruinas Jesuíticas de San Francisco ubicadas al Oeste de la Plaza Pedro del Castillo. El edificio construido por los jesuitas entre 1716 y 1731, posteriormente pasó a manos de la orden franciscana y se convirtió en ruinas en el terremoto del 1861. En 1941 fue declarado Monumento Histórico Nacional, actuando en el lugar un centro de rescate y conservación de su patrimonio. Funciona de lunes a viernes de 9 a 17. Otros suman a la historia, el arte. El Museo Provincial de Bellas Artes Emiliano Guiñazú, ubicado en calle San Martín de Mayor Drumond, cuenta con colecciones originales de importantes artistas provinciales, nacionales y con reproducciones de cuadros y esculturas del arte universal. La casona donada por Doña Narcisa Araujo de Guiñazú en 1945 y fue transformada en un museo-parque (trazado geométrico de cipreses que forman salas al aire libre para la exposición de esculturas). Conocida como Casa Fader, en honor al artista plástico que pintó los murales del hall y de la piscina interna, abre al público en 1951 y en 1998 se declaran bienes del patrimonio provincial tanto el museo como el parque y la obra del artista Fernando Fader. Actualmente se realizan trabajos de restauración por lo que solo se encuentra abierto el museo al aire libre en sus jardines. Para ingresar se debe abonar un bono contribución de $10, habilitado de martes a viernes de 11 a 19:30 y sábados y domingos de 14:30 a 19:30. El arte tiene dos templos en Mendoza: El Museo de Arte Moderno (MMAMM) ubicado en el corazón de la Plaza Independencia. Tiene una sala permanente y otra transitoria. La primera está consagrada al arte mendocino desde 1930 hasta la actualidad, e incluye pintura, cerámica, dibujo y escultura. La segunda destinada a muestras individuales o colectivas. La Galería de Grabado contiene una exposición seleccionada del patrimonio referido a las diversas técnicas, culminando con la colección Historia de la Xilografía. También se halla un almacén de guarda de la obra patrimonial, que incluye una rica colección patrimonial con obras de grandes artistas argentinos como Berni, Spilimbergo, Gambarte, Pérez Celis, Crivelli, Quesada, Scafatti, Hoffman, entre otros. Abierto de Martes a viernes de 9 a 20 y Sábados y domingos de 14 a 20. Tiene un costo de $18. El otro templo es el Espacio Contemporáneo de Arte (ECA) sitiado en calle España y Gutiérrez donde se dan cita artistas plásticos y escultores de las más variadas tendencias. Finalmente, el Museo de Ciencia Naturales es un plan ideal para hacer con niños. Emplazado en el antiguo edificio con forma de barco en el Parque General San Martín posee cuatro salas. En una de ellas se halla una colección de aves y mamíferos embalsamados, en otra el área de mineralogía se han recolectado distintos materiales que permiten ver la evolución geológica. También tiene un área para los vegetales en todas sus especies y una sala de arqueología. Espacios culturales Este concepto de Espacios culturales ha tomado fuerza en la provincia en la última década y dos grandes e imponentes complejos se crearon en función de esta novedosa tendencia: el Le Park y la Nave Cultural. Ambos son complejos con una vasta actividad cultural que combinan diferentes tipos de arte. La Nave Cultural brinda grandes posibilidades para la realización de todo tipo de actividades artísticas y culturales. Se halla donde fuera la Estación de Cargas del Ferrocarril General San Martín y de alguna manera jerarquizó toda la zona del Parque Central, aportando integración y consolidación de un área urbana. Cuenta con tres salas destinadas a diferentes actividades en la cuales pueden ir desde un congreso o exposición hasta teatro, cine y títeres. Su agenda está disponible en www.ciudaddemendoza.gov.ar/nave-cultural. El Espacio Cultural Julio Le Parc fue inaugurado en octubre de 2012. Busca generar un nuevo sistema de consumo y de producción de bienes y servicios culturales; revalorizando el patrimonio artístico, simbólico y material de la provincia. El espacio lleva el nombre del artista plástico mendocino Julio Le Parc, quien pertenece a una generación de artistas latinoamericanos que aportan al arte mundial la excelencia y la apertura a nuevas posibilidades expresivas contemporáneas. Se trata de un homenaje a quien nació en nuestra provincia, recibió su formación en nuestro país e hizo trascender su obra al mundo. El edificio tiene 5 salas cada una de ellas destinadas a diferentes actividades como música, danza, exposición de arte plástico e instalaciones, de hecho una gran meca roja de vidrios encandila al ingreso siendo una instalación del mismo Le Parc, obra que cautiva a todos los que ingresan al Espacio. Para consultar su agenda: www.espacioleparc.com

Semana Santa, en tiempos non tan sanctos

Hace algunos años, la Semana Santa solo tenía la carga religiosa que correspondía. Con el paso del tiempo, se convirtió en el fin de semana largo más codiciado para pequeños viajes y salidas turísticas, pero místicamente nunca pierde la sensación de nostalgia que provoca la Pascua. Carla Luna Después de la Vendimia y el comienzo de clases parece que el año realmente toma vuelo y apenas estamos tomando envión con la llegada del otoño, la Semana Santa nos da el primer bálsamo de descanso. Esta fecha tiene particulares únicas que la hacen distinta a cualquier fin de semana largo porque tiene una alta connotación espiritual para los creyentes evocando la entrega y el renacer, mientras que para los menos creyentes, la Pascua significa una festividad que se celebra el domingo con huevo de chocolate mediante. Lo cierto es que la fecha tiene tintes nostálgicos que propone un receso diferente. La montaña mendocina se ha convertido en uno de los sitios más elegidos para la Semana Santa, a tal punto que el cordón de villas cordilleranas desde Potrerillos satura su alojamiento en esta época. Vía Crusis en la montaña y misas a cielo abierto logran transmitir sosiego espiritual, mientras que las actividades aventuras y las caminatas se complementan con el paisaje. La cruz asciende por la ladera de la montaña, en el Valle de Sol, seguida de miles de fieles que con devoción llegan hasta la cima para escuchar el eco de la oración. El Festival de Música Clásica por los Caminos del Vino es sin lugar a duda, uno de los atractivos turísticos más amigables para la época donde las bodegas abren sus puertas para que los visitantes disfruten de un magnífico arte en medio de toneles y barricas, aromas a mosto y una buena copa de malbec. Con el paso de sus 15 ediciones, se sumaron hoteles, municipios, capillas, iglesias y sitios patrimoniales como escenario para recibir a una gama de artistas nacionales internacionales. El encuentro musical de otoño más importante del país estará dedicado en su edición 2015 a conmemorar el nacimiento del “Padre de la Música”, el compositor alemán Johann Sebastián Bach, patrimonio musical intangible de toda la humanidad. El huevo de Pascua y el conejo Hacer huevos de Pascua con los chicos, esconderlos en un jardín para jugar a descubrirlos o romperlos buscando confites y sorpresas parecen ser una tradición de Pascua ineludible. Por supuesto que para los niños es un plan que no falla pero la realidad es que el conejo pacuero y su respectivo huevo poco tienen que ver con la Pascua que conocemos los latinoamericanos. Aunque sus orígenes no están muy definidos, se supone que la elección del conejo se debe a su conocida capacidad de procreación, de gran valor simbólico en una temporada de fiestas dedicadas a la fertilidad. Su uso se remonta a pueblos antiguos del norte europeo, que veían en la liebre un símbolo: sus fuertes patas traseras le permiten moverse siempre hacia arriba con facilidad, mientras que sus débiles patas delanteras le dificultan el descenso. Los pueblos cristianos lo han tomado como un renacer y de alguna manera genera una acción de unión y alegría para los niños casi como Papá Noel. Escapadas turísticas Nuestra provincia tiene un Sur ideal para visitar en cuatro días. El Atuel de San Rafael y todos sus exquisitos embalses tanto Valle Grande como Los Reyunos ofrecen turismo aventura, catamaranes, excursiones y paisajes maravillosos. Siendo complementadas por actividades religiosas como es la peregrinación de la Virgen del Valle Grande en la que 25 mil marchan en su encuentro. Malargüe tiene un sinfín de atractivos como La Payunia, declarada Patrimonio de la Humanidad, el observatorio Pierre Auger, un sitio donde se resuelve el apasionante enigma de la astrofísica contemporánea, y la naturaleza bruta del Volcán Malacara, Valle Hermoso y Los Molles, donde se han asentado nuevos emprendimientos de alojamiento y gastronomía. Otra opción podría estar en la provincia vecina de San Luis que cuenta con paquetes especiales para Semana Santa tano en Merlo como en el Complejo Potrero Los Funes. Asimismo el destino más elegido por los mendocinos sigue siendo Chile y Buenos Aires. El país trasandino tiene sus ventajas y desventajas. Por supuesto que sus playas, el encanto de sus ciudades y la posibilidad de hacer compras no se descartan pero la aduana puede ser un obstáculo tanto por la afluencia del paso como por el riesgo climático. Turismo religioso Muchos quieren aprovechar el tiempo de descanso haciendo turismo pero no perder en sentido de la Semana Santa por lo que se busca conciliar entre la fe y el paseo. Los ámbitos de culto conforman un destacado segmento del mercado turístico en Mendoza. En el turismo religioso, se pueden visitar tanto los santuarios de devoción popular como las catedrales y capillas; los monasterios o conventos. Algunos de los más destacados son el Monasterio del Cristo Orante en Tupungato, donde se puede participar de la misa, en la pequeña capilla de madera instalada desde 1996, o apreciar las artesanías. La Ciudad ofrece un recorrido que se llama Siete iglesias, entre las que se encuentra la Catedral de Loreto, Nuestra Señora de la Merced, Basílica de Nuestra Señora de Rosario; San Juan Bosco, Sagrado Corazón de Jesús; de San Nicolás y Santiago Apóstol y la Basílica de San Francisco, donde descansan los restos de Mercedes, hija del Gral. San Martín. La iglesia de La Carrodilla Declarada Monumento Nacional, fue edificada en 1840 en la casa de la familia Solanilla, quienes trajeron desde España la imagen que hoy se venera como la “Patrona de los Viñedos”. Finalmente, El Calvario que data de 1840 y se encuentra en las proximidades de la Iglesia de la Carrodilla. Las bases de las columnas, que recuerdan las estaciones de la vía dolorosa, son de piedra del lugar. Es el más antiguo del país y lo visitan millares de devotos.