En los tiempos agitados que transitamos, inmersos en una sociedad demandante y competitiva surge un escaparate para recordarnos que la vida está para ser vivida y disfrutarla en cada momento.
Las terapias alternativas avanzan ocupando terrenos y se han convertido en los últimos años en una filosofía de vida cada vez más común. Tanto que se puede escuchar con frecuencia que la gente emplea reiki, reflexología, acupuntura, aromaterapia y demás métodos holísticos antiguamente vetados o mal vistos, para mejorar su calidad de vida. Todas aquellas terapias alternativas que fortalecen las energías y armonizan cuerpo, mente, emociones y espíritu toman un valor preponderante en una sociedad estresada, competitiva y consumista.
La instructora de yoga Patricia Bordas asegura que nuestros sentidos tienen relación directa con las energías. “La música, el aire, los aromas purifican de tal forma que nos conectan con nuestras energías, siendo un canal para sentirnos mejor”. La energía está en la mente según la terapeuta alternativa Maria Funes quien hace referencia a cultivar el cuerpo, la mente y espíritu para ser feliz “El poder mental va unido con la psicología y de acuerdo a la personalidad y el temperamento es el resultado”. Ambas profesionales coinciden en que este equilibrio emocional nos permite crecer y madurar como personas siendo concientes de lo que vivimos en cada momento.
Hoy en día, hay tanta demanda que la persona no encuentra su estado de quietud y por supuesto menos de meditación comenta la instructora de yoga. “La meditación es una forma de encontrarse a si mismo, tiene que ver con una práctica que depende del ritmo de vida que el individuo lleve. Dejar la mente en blanco para mucha gente es casi imposible. Es importante crear el clima para conseguir la quietud. Hoy el mundo lo pide a gritos porque hay mucha insatisfacción y no está el placer real, eso de sentirse pleno y feliz”. Lograr un estado de meditación es uno de los niveles más altos de estas terapias. El camino para llegar a ello es a través de la concentración, de conocerse a sí mismo, de emplear la lógica y la coherencia a fin de encontrar nuestra propia esencia como dice la terapeuta. ”La oxigenación produce la relajación porque al oxigenar nuestros músculos del cuerpo se produce la liberación a través de técnicas de respiración”.
El mundo empuja que las personas deben vivir de una forma mas tranquila y es posible distinguir el cambio gradual, ya que la gente intenta volcarse a lo sano apoyanándose en todos las herramientas, entre ellas la respiración, la alimentación y la actividad física. Asimismo, la sociedad está tan contaminada que la competencia arrasa hasta en los momentos de ocio del individuo, lo cual no siempre lo deja disfrutar de esos tiempos para lo cual Bordas aconseja “observarnos, porque el cambio solo está en uno”.
En este momento hay muchas terapias y muchos terapeutas. Todas tratan al ser humano como lo que es “Un Todo”, armonizando cuerpo, mente, emociones y espíritu. El proceso de “curación” que abordan este tipo de técnicas va desde lo más profundo hacia fuera. No distingue religiones, ni científicos, es simplemente una filosofía de vida que nace de una fuente oriental y que puede ser trasladada a todos los ámbitos.
Existen distintas técnicas y todas son valederas. El yoga, la meditación, el tai chi, chin con, el bodybalance y el reiki por nombrar algunos pueden ser comienzos para descubrirnos a nosotros mismos a través de terapias que enriquezcan el desarrollo personal. Para ello, es imprescindible parar la vorágine diaria y tomarse un tiempo para conocernos, prestar atención, vivir la vida, y no solamente pasar por ella con una lista de encargos. “el secreto es la simplicidad” resumió Mari Funes.
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