Viajar y trabajar es un plan posible, para jóvenes entre 21 a 30 años. Esta posibilidad la brindan ciertos programa internacionales especialmente diseñados para estudiantes universitarios o terciarios que tienen el verano libre y lo aprovechan aprendiendo el idioma del país receptor y ganando unos dólares que permitan costear el viaje. Este tipo de programas comenzaron a tener auge en nuestra provincia a comienzos del 2000 y el único requisito es estar dentro de esa franja etaria, ser estudiante y tener un determinado manejo del idioma receptor.
Los países más abocados a estos programas suelen ser Estados Unidos con un amplio abanico de centros de esquí y algunos complejos turísticos. Canadá, Nueva Zelanda, e Irlanda son destinos que también se suman labores relacionadas con el turismo, la hotelería y la gastronomía. Francia tiene un plan similar denominado “Au pair”, que permite estudiar y cuidar niños, mientras que otros países comienzan a desarrollar propuestas orientadas a las pasantías de los jóvenes profesionales.
Es importante aclarar, que los programas no están pensando para que los viajeros se queden con ese empleo, ya que el mismo se plantea con una visa especial para esta actividad y la empresa empleadora ofrece un trabajo denominado temporario. Asimismo, lo que se gana en una temporada es suficiente para cubrir el costo del programa, y tener la posibilidad de conocer aun más las zonas aledañas del destino elegido.
La selección de estudiantes que viajan está sujeto a entrevistas y disponibilidad de los empleadores, los cuales suelen hacer ferias los antes de viajar y de esta forma evacuar dudas. De hecho en agosto se realiza la última feria para el verano 2010. El objetivo del programa consiste en brindarle a los jóvenes la oportunidad de tener una experiencia de trabajo remunerada y conocer otras culturas, conviviendo con ciudadanos de todo el mundo.
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